El músico participa en un documental sobre el cuádruple femicida y afirma que el odontólogo “reacciona de manera violenta para salir de una injusticia”. Sus dichos se suman a su historial de declaraciones que relativizan la violencia de género y reavivan el debate público.
BUENOS AIRES – El músico Gustavo Cordera se encuentra nuevamente en el centro de una controversia tras la difusión de sus declaraciones en un nuevo documental sobre el cuádruple femicida Ricardo Barreda, donde afirma que “cualquiera puede cometer un asesinato en cualquier momento”. Los comentarios, emitidos en el marco del estreno de la producción, han generado un fuerte repudio.
La serie documental, titulada “Barreda, el odontólogo femicida” y estrenada en la plataforma Flow, analiza cómo parte de la sociedad minimizó los crímenes cometidos en 1992, cuando Barreda asesinó a su esposa, sus dos hijas y su suegra. La participación de Cordera se debe a la inclusión del femicida en su canción de 2004, “La argentinidad al palo”.
Consultado en el documental sobre la celebración social del caso, Cordera expresó: “Para mí, Barreda simboliza una injusticia cometida sobre una persona que reacciona de manera violenta para salir de esa injusticia”. Al explicar por qué incluyó su propio apellido junto al de conocidos homicidas en su letra, añadió: “Me puse en ese lugar como diciéndole a todos ellos que yo también me puedo equivocar, que cualquiera puede cometer un asesinato en cualquier momento. Hasta inclusive yo puedo cometer un crimen”.
Estos nuevos comentarios se suman a un historial de declaraciones polémicas del artista sobre la violencia de género. En 2016, durante una charla con estudiantes de periodismo, Cordera realizó apología de la violación, afirmando que “hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo”. Dichas declaraciones derivaron en una imputación por el delito de “incitación a la violencia colectiva”, causa de la que fue sobreseído en noviembre de 2020.
Posteriormente, el músico ha calificado la condena social y judicial que enfrentó como una “persecución organizada” y una “cancelación”. En una entrevista televisiva llegó a compararse con figuras como Mahatma Gandhi y Jesús, y recientemente, en un programa de streaming, describió el proceso como una operación de “inversión para la persecución y cancelación de una persona”, a pesar de haber continuado con su actividad artística a nivel nacional e internacional durante estos años. Las nuevas declaraciones en el documental han reavivado el debate público sobre su discurso







