El gremio que nuclea a los recibidores de granos mantiene paralizadas dos de sus tres ramas tras el fracaso de las negociaciones con las cámaras empresarias. Reclaman una recomposición salarial y el pago del bono anual.
El secretario general de la Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (URGARA), Juan Carlos Peralta, denunció la “intransigencia empresaria” en el marco del conflicto salarial que mantiene paralizadas distintas ramas del sector y pidió la intervención del Ministerio de Trabajo para destrabar las negociaciones.
En diálogo con Cerrando la Mañana por Multimedio NQ, Peralta explicó que la medida de fuerza comenzó a las 00 horas de este martes y afecta a las ramas de control de exportación y acopio, mientras que en puertos privados rige la conciliación obligatoria. “Hoy no se trabajó en control de exportación, lo que impacta directamente en los embarques”, confirmó.
El gremio reclama una recomposición salarial por los meses de septiembre a diciembre y el pago del bono anual, que varias empresas se niegan a abonar. “Hace semanas que venimos intentando cerrar un acuerdo, pero el viernes y el lunes nos dijeron directamente que no había nada para ofrecer. Por eso, con el respaldo de las bases, decidimos iniciar medidas de fuerza”, explicó Peralta.
El sindicalista subrayó que el conflicto se da en un contexto de récord de exportaciones. “Las empresas se beneficiaron con el tipo de cambio y la quita de retenciones. Lo único que pedimos es discutir una recomposición razonable. No puede ser que en el sector más pujante del país los trabajadores pierdan poder adquisitivo”, sostuvo.
En relación con el bono anual, Peralta apuntó a la Federación del Centro de Acopiadores, que el año pasado decidió no pagarlo por primera vez en una década. “No estamos hablando de Coninagro, que representa a las cooperativas, sino de la Federación. Lo que pedimos es simplemente sentarnos a negociar”, aclaró.
Además, denunció una desregulación en las escalas salariales del sector de acopio: “El 80% de los trabajadores está en la categoría más baja. Nos desregularon el libro de existencias F-16, y eso impide comprobar el movimiento real de las plantas. En muchos casos, los compañeros cobran menos de lo que corresponde”.
Desde URGARA reiteraron su disposición al diálogo, pero acusan a las cámaras empresarias de mantener una postura cerrada. “Agotamos todas las instancias. Le pedimos al Ministerio de Trabajo que intervenga para garantizar una negociación seria y justa”, enfatizó Peralta.
El dirigente recordó que el gremio representa tres ramas: puertos privados (como ACA, Sitio Cero y Terminal Quequén), control de exportación (empresas que verifican la calidad de la mercadería) y acopio (planta de almacenamiento dependientes de la Federación de Acopiadores y Coninagro). “Los tres convenios atraviesan el mismo problema: la falta de voluntad empresaria para reconocer lo que corresponde”, concluyó.
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