La comunidad de Necochea se enfrenta nuevamente a un llamado a la solidaridad, esta vez para acompañar a la familia Estuarte en una carrera contrarreloj por la salud de su hijo Tomás. El joven padece plaquetopenia inmune, una afección que le impide a su organismo generar plaquetas, dejándolo con defensas muy bajas y en una situación de vulnerabilidad constante.
El tratamiento que Tomás necesita para estabilizar su condición es de un costo extremadamente elevado. “El medicamento del nene son 28 comprimidos y vale casi 6 millones de pesos”, explicó su padre, Héctor Estuarte, en diálogo con los medios. Esta cifra resulta inabordable para la economía familiar, y el obstáculo principal radica en la negativa de su obra social, OSPRERA, a proporcionar la cobertura necesaria.
“La obra social no se quiere hacer cargo por ahora, así que vamos a presentar un recurso de amparo”, adelantó Héctor. La familia no solo ha iniciado la vía legal, sino que, ante la urgencia del cuadro clínico de Tomás, ha decidido hacer pública su situación y solicitar el apoyo de los vecinos. La desesperación es palpable en el relato del padre: “¿Quién tiene un sueldo así? Nosotros estamos lejos del alcance de eso”.
Héctor Estuarte, quien al igual que su hijo Tomás es jugador de fútbol en el Club Gimnasia y Esgrima, expresó su frustración con el sistema de salud. “Tengo 21 años de aporte, no la usé prácticamente y ahora que la preciso miran para otro lado”, lamentó. La campaña solidaria busca reunir los fondos para adquirir al menos la primera caja del medicamento, lo que le daría a Tomás la medicación que necesita de inmediato y a la familia un margen de tiempo para continuar la batalla legal.
“La idea es conseguir la plata cuanto antes y que esto no se haga crónico, porque ¿cómo hacemos para conseguir esta plata todos los meses? Es imposible”, reflexionó Héctor, evidenciando la angustia que atraviesan. Para colaborar con la causa, se ha habilitado una cuenta para recibir donaciones a través del alias reina.nieto.grumo, a nombre de Héctor Estuarte.
El caso pone de manifiesto las dificultades que enfrentan muchas familias para acceder a tratamientos de alto costo y la importancia de la red de contención comunitaria para superar las barreras burocráticas y económicas en momentos críticos.







