Quequén – La empresa Aloncar, con su astillero en Quequén, celebró hoy un nuevo hito al botar su octava embarcación. La construcción, realizada íntegramente en los galpones de la compañía, es un nuevo logro para la industria naval local y un claro indicador del crecimiento sostenido de la empresa en la región.
El evento de botadura contó con la presencia de numerosas personas vinculadas a la actividad pesquera y portuaria. Durante la ceremonia, el empresario Hugo Obregozo agradeció a su socio y a los trabajadores del astillero, destacando el esfuerzo y la dedicación que hicieron posible esta nueva entrega.
Obregozo también subrayó la importancia de la construcción naval como motor económico. Explicó que la fabricación de un barco no solo impulsa otras actividades económicas, sino que también genera una valiosa oportunidad de capacitación. En este caso, algunos de los operarios de su astillero pudieron especializarse en tan solo ocho meses para adquirir los conocimientos necesarios en la construcción de este navío, que próximamente se dirigirá al sur del país.
Para finalizar, el empresario anunció que el astillero no detendrá su producción: en los próximos dos meses, se espera la botadura de un nuevo barco en el río Quequén.
