Axel Kicillof, Máximo Kirchner y Sergio Massa han alcanzado un principio de acuerdo para la distribución de las bancas legislativas provinciales que esperan obtener en las elecciones del 7 de septiembre bajo el sello Fuerza Patria. El gobernador y el kirchnerismo se quedarán cada uno con el 38% de los lugares, mientras que el 24% restante será para el Frente Renovador.
Una fuente cercana a la negociación confió que este poroteo se resolvió rápidamente, aunque la discusión por la lista de postulantes a la Cámara Baja del Congreso Nacional se perfila “más áspera”, dado que Fuerza Patria está negociando todas las candidaturas en simultáneo.
El peronismo estima retener las 29 bancas que pone en juego en la Legislatura bonaerense, obtenidas en 2021. De concretarse esa proyección y el reparto acordado, el Movimiento Derecho al Futuro (MDF) obtendría once bancas, al igual que el cristinismo, y siete serían para el massismo. Así, Kicillof se perfila como el principal beneficiado en la pulseada, aunque también es quien deberá distribuir más lugares entre sus más de 40 intendentes, centrales gremiales y organizaciones sociales.
Reparto por secciones electorales: un complejo entramado de intereses
El acuerdo detalla el reparto tentativo por cada sección electoral:
- Primera Sección (Conurbano Norte): Se juegan ocho bancas de Senado. El peronismo arriesga cuatro y espera asegurar tres, con una cuarta en disputa. Los primeros tres lugares se repartirán uno por fuerza. Aquí Kicillof saldría ganando, ya que no tiene representación propia y tres de las cuatro bancas son kirchneristas, y una massista.
- Segunda Sección (Diputados): Se elegirán 11 representantes. El peronismo cree que retendrá los cuatro actuales. Dos de esas bancas pertenecen a espacios fuera de los tres mayoritarios (Juan Grabois y UOM). Se deberá definir cómo se contabilizan estos lugares, con el kirchnerismo probablemente sumando la banca de Grabois, dejando un reparto de uno por sector más uno gremialista. Los intendentes kicillofistas presionan por un lugar.
- Tercera Sección (Diputados): La que más bancas pone en juego (18). El peronismo busca renovar las ocho actuales y sumar una más. Cuatro bancas son MDF, dos de La Cámpora y dos del Frente Renovador. El gobernador podría perder un escaño debido a suplencias en La Matanza.
- Cuarta Sección (Senado): Siete senadurías en juego. El peronismo pretende retener las tres actuales, todas bajo control kirchnerista. El reparto sería uno por sector. Los intendentes kicillofistas y el Frente Renovador, fuerte en la región (con Alexis Guerrera como referente), presionan por esos lugares.
- Quinta Sección (Senado): Cinco senadurías en juego. Fuerza Patria buscará retener las dos que tiene, ambas kirchneristas. Kicillof podría obtener el segundo lugar, con la camporista Fernanda Raverta o su designación encabezando la lista. Kicillof tiene referentes importantes como Gustavo Pulti (exintendente de Mar del Plata) y Gustavo Barrera (Villa Gesell).
- Sexta Sección (Diputados): Once bancas en disputa. Fuerza Patria calcula retener las cuatro actuales (dos kirchneristas, una FR, una MDF), manteniendo el mismo reparto.
- Séptima Sección (Senado): La que menos bancas reparte (tres). El peronismo aspira a retener la única que posee. La pelea es por el primer lugar de la nómina, que se definirá por competitividad. Actualmente la ocupa Eduardo Bucca, con buen vínculo tanto con CFK como con Kicillof.
- Octava Sección (Diputados – Capital): Se eligen seis bancas. El peronismo tiene tres, una por cada sector, y esa distribución podría repetirse. Sin embargo, si Fuerza Patria logra una victoria contundente en La Plata (distrito de Julio Alak, cercano a Kicillof), podría sumar una cuarta banca