Se trata de los primeros afiliados que completaron el trámite para revertir la decisión de la obra social, que el 1º de agosto movió 10.000 cápitas al sector privado. “Mucha gente se va enterando cuando busca atención”, dijo la secretaria de Salud, Andrea Perestiuk.
Unos 1.500 jubilados afiliados a PAMI han sido traspasados nuevamente al Hospital Municipal Dr. Emilio Ferreyra, luego de que realizaran la solicitud formal en las oficinas de la obra social para revertir el cambio implementado el 1º de agosto.
Ese día, PAMI efectivizó el traspaso de 10.000 cápitas del hospital municipal a la Clínica Cruz Azul para la cobertura de atenciones del segundo nivel de complejidad, lo que implica que esos afiliados deben atenderse obligatoriamente en el sector privado para internaciones y cirugías.
A partir de allí, varios afectados iniciaron el trámite para regresar al sistema público. El número de 1.500 corresponde a los primeros trámites completados a fines de septiembre. Se estima que esta cifra seguirá creciendo, ya que la gestión demora aproximadamente un mes desde que se solicita hasta que se hace efectivo el traspaso.
Sobre esta primera ola de regresos, la secretaria de Salud municipal, Andrea Perestiuk, señaló que “son los primeros que se pasaron, que son los que estaban más informados y sabían que su cápita a partir del 1º de agosto no iba a estar más en el Hospital”.
“La realidad es que mucha gente se va enterando a medida que se acerca buscando atención en el Hospital y se encuentra con que ahora capita en la clínica”, explicó la funcionaria. Por ello, consideró que el impacto real se podrá “medir un poco mejor de acá a dos o tres meses más”.
Cabe recordar que el pasado 7 de julio, la Municipalidad de Necochea, encabezada por el intendente Arturo Rojas, recibió una carta documento de PAMI notificando la reducción de 10.000 cápitas “sin ninguna explicación”. A pesar de las gestiones del Ejecutivo local para revertir la medida, esta se concretó, dejando al hospital con solo 2.600 cápitas y a la clínica con 14.000.
Ahora, por decisión de los mismos jubilados, esa balanza comienza a modificarse. Desde el municipio se ha remarcado en repetidas oportunidades que la decisión de PAMI impacta negativamente en los afiliados, indicando que la clínica “no cuenta con la capacidad suficiente y las especialidades requeridas para un segundo nivel de internación”.
Aquellos afiliados de PAMI que deseen que su cápita regrese al Hospital Ferreyra deben realizar el trámite personalmente en la sede de la obra social, ubicada en calle 62 Nº 3143.







