El diputado provincial Gustavo Pulti generó revuelo en el cierre de listas al presentar su propio sello, Acción Marplatense, para competir en el Concejo Deliberante de General Pueyrredon. La decisión, que lo ubica por fuera del frente Fuerza Patria, responde a la disconformidad del dirigente kicillofista con las negociaciones dentro del peronismo local.
Pulti, que buscaba encabezar la boleta al Senado provincial por la Quinta Sección Electoral, no obtuvo el lugar deseado. La lista seccional de Fuerza Patria quedó finalmente encabezada por la marplatense Fernanda Raverta, referente de La Cámpora. Ante este escenario, el ex intendente de Mar del Plata optó por armar una “lista corta” exclusivamente para disputar escaños en el Concejo Deliberante, donde su rostro aparecerá en la primera ubicación.
Las negociaciones que no conformaron a Pulti
Según trascendió, en las negociaciones finales de Fuerza Patria, el segundo lugar en la lista seccional (detrás de Raverta) fue para un representante del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), el espacio del gobernador Axel Kicillof. Este lunes, el ex intendente de Mar Chiquita, Jorge Paredi, firmó para ocupar esa posición.
A nivel local, Pulti tampoco obtuvo las ubicaciones que pretendía. El espacio de Kicillof en la nómina del Concejo Deliberante recién consiguió el cuarto lugar, que quedó para Raúl Calamante, de la CTA.
Con su lista pura de Acción Marplatense, Pulti y sus dirigentes buscarán alcanzar el 8.33% de los votos necesarios para acceder a una banca local. Una tarea que se presenta difícil, pero no imposible. Desde Fuerza Patria, argumentan que en 2023, Pulti encabezó la nómina legislativa y logró ingresar como concejal número uno, sumando dos ediles a su espacio. En este turno electoral, el escenario fue diferente.