Una madre se presentó desesperada en el cuartel de avenida 42 pidiendo auxilio porque su hijo presentaba signos de asfixia. Un oficial de guardia le practicó maniobras de desobstrucción y logró reanimarlo.
El oficial de bomberos Santiago Gleriano se convirtió en el héroe de la jornada al salvar la vida de un bebé que sufría una obstrucción respiratoria. Gleriano se encontraba desempeñando funciones como ayudante de guardia en el cuartel, situado en la avenida 42, cuando una mujer irrumpió en el lugar pidiendo auxilio.
La madre, visiblemente angustiada, explicó que su bebé no podía respirar. Ante la emergencia, el bombero tomó al niño y le practicó de inmediato las maniobras de desobstrucción correspondientes.
La rápida y efectiva intervención del oficial Gleriano fue crucial. Para el momento en que la ambulancia del servicio de emergencias arribó al cuartel, el bebé ya había recuperado sus signos vitales y se encontraba fuera de peligro.
Por precaución, tanto la madre como el bebé fueron trasladados en la ambulancia al Hospital municipal para recibir una evaluación médica completa.







